Ética en fotografía macro

Como ya sabéis estas semanas tenéis nuevas clases del curso de fotografía macro, y eso hace que me me plantee continuamente lo que os voy enseñando en el curso y vuestras posibles reacciones tras seguir cada clase. Así que he pensado que compartir algunos comentarios que considero básicos sobre ética al hacer fotografía de naturaleza y fotografía macro más concretamente, puede ser interesante en este momento. Lo que menos me gustaría es que tras deciros en una clase que tenéis que conseguir los fondos lo más limpios posible, cojáis vuestra cámara, salgáis al campo y arraséis con todos los elementos que quedan por detrás de la flor que vais a fotografiar. No, esa no es la idea. Una cosa es buscar fondos limpios y otra cosa es destrozar las cosas. https://youtu.be/jW-UtRiltZc No, nuestra foto no vale más que el entorno Es así, quizás muchos/as no estaréis de acuerdo conmigo y pensaréis que por una foto hay que hacer lo que sea necesario. Pero siento informaros de que esa teoría nos viene heredada del fotoperiodismo y nada tiene que ver con la fotografía de naturaleza. Sí, puedes hacer lo necesario para conseguir una foto, puedes levantarte de madrugada, puedes subir una montaña cargando todo el material, puedes incluso viajar medio mundo para fotografiar una especie que sólo vive en un rincón del planeta. Pero lo que no podemos hacer es alterar de ninguna forma la naturaleza sólo para que nuestra foto quede más bonita. Todas las plantas son igual de importantes Parece que hay plantas que llaman más nuestra atención al hacer fotografía. Por ejemplo, las orquídeas silvestres son una auténtica joya de la naturaleza. Pero el hierbajo que hay a su lado, es tan importante para el ecosistema como esa hermosa flor, muchas veces diminuta y que tanto nos ha costado encontrar. Y ya no entramos en comparaciones entre plantas de una misma especie, que por el mero hecho de entrar una en nuestro encuadre, cobra más importancia que las otras. Al hacer fotos macro, o no macro, evita arrancar, chafar o pisotear plantas simplemente porque no van a entrar en nuestro encuadre. El fondo es el que es, si no te gusta, busca otro Los fondos limpios y homogéneos son fantásticos en fotografía macro. Esos desenfoques en su justa medida, que nos permiten tener al sujeto que fotografiamos totalmente enfocado pero con un fondo tan desenfocado que queda como una superficie homogénea que hace que destaque mucho ese sujeto. Pero ese fondo no lo vas a encontrar en cada planta, insecto u hongo que vayas a fotografiar. En algunos casos tendrás que buscar y buscar hasta encontrar una flor determinada con el fondo que te gustaría, que esté a la suficiente distancia para que quede bien desenfocado o que tenga una superficie lo suficientemente homogénea para que no entorpezca tu composición. Pero si no encuentras ese fondo, sólo tienes tres opciones, seguir buscando, no hacer la foto, o colocar un fondo artificial sea físicamente (una cartulina por ejemplo) o digitalmente. Limpiar el fondo arrancando plantas, no debería ser una opción en tu cabeza. Arrancar hierbajos y amontonarlos tras el sujeto que vas a fotografiar para conseguir así un fondo más homogéneo y que contraste, tampoco debería ser una opción. No los saques de su ambiente Ya no sólo los insectos que algunos fotografían disecados. Tampoco te lleves plantas a casa o al estudio para poder colocarlas e iluminarlas como quieres. Coger una planta o un animal para transportarla y fotografiarla,